Y volviste...recuerdo que fueron días difíciles sin ti, recuerdo que el corazón me latía tan fuerte pensándote que podía escucharlo en mis oídos, volviste y esta vez si que fue para siempre, volviste para quedarte en mi, volviste para hacernos eternos, volviste para nunca más olvidarte, volviste y te quedaste en mi.
Noviembre, tu crecías en mi interior, yo volvía a crecer en mi. Es inevitable no sonreír y pensar en la primera vez que escuché ese latido, sí, estaba embarazada, Ignacia, ese sería su nombre, siempre lo pensé y se haría realidad, nuestra hija, nuestra piri, como le llamábamos, su corazón era fuerte, latía rápido, las lagrimas se apoderaron de mi, pensé en ti, en lo difícil que sería todo, pero confiaba, todo iba a estar bien, a pesar de que la noticia no te hubiese gustado, a pesar de que te ausentaste por unas semanas, sabía que todo iba a estar bien, tenía miedo, tenía pena, tenía alegría, te quería conmigo, era un mundo desconocido para mi y lo afronté sola.
9 meses, suena poco, 40 semanas, suena un poco más, 280 días, suena eterno...así fue, 280 días donde solo pude estar contigo un par de ellos, donde no pude hablarte todos los días, donde necesité que me dijeran linda, que aunque estuviera un gramo más gorda cada día, que era la gordura mas bella que habían visto, necesité que me abrazaran por las noches y necesité que me dijeran te amo todos los días, te busqué eternamente, te pedí que por favor estuvieras, pero a cambio solo tenía quejas, fue el peor embarazo que imaginé, me sentí sola, fea, y tonta, el mundo me miraba con ojos de amor, pero yo solo quería q tu , mi P, lo hicieras, pero no, tu trabajo, tu formación, el dinero, tu sentimientos, tu distancia, tus problemas, eran mas importantes que nosotras, y yo, cada vez que te dije que me sentía mal, salías con tu frase de "yo también", jamás pudiste ponerte en mi lugar, yo solo quería estar contigo, acompañada de la única persona que podía contenerme en ese momento, te quedaste conmigo a pesar de todo, me quedé contigo a pesar de todo, sabía que tu proceso no sería como el mío, aun duele, a veces, de vez en cuando me acuerdo de lo mal y asqueroso que fue haber estado embarazada de ti, de la poca contención que me diste y el miedo que dejaste en mi de volver a embarazarme, aun así seguí ahí, remando en nuestro barquito, intentando que esto pasara y que tu te dieras cuenta de que no hacías todo perfecto, que el rol más importante que debías cumplir lo tenías tirado por ahí a ver si te alcanzaba el tiempo, debo admitir que odié tu egoísmo, odié que cada día solo miraras la punta de tu nariz, que me culparas a mi de tus acciones, que me culparas a mi de quedar embarazada, que me culparas a mi de querer esto, mírate, siempre eras el protagonista y la gran víctima de todo y yo, la bruja mala.
Ojalá hubiera sido una bruja mala de verdad, porque si lo hubiera sido, jamás hubiera pasado por lo que pasé contigo, no de esa forma, porque dueles....
lunes, 26 de septiembre de 2016
lunes, 22 de septiembre de 2014
A mi hombre...
Me había rehusado a escribir en el blog porque durante ocho meses tuve unos oídos, sonrisa y ojos que respondían a mis palabras, hoy están más lejos, siguen estando, pero a la distancia y con eso también me guardo mis palabras, miradas y gestos que son solo para él.
Ha pasado rápido el tiempo, quizás no, pero con él pareciera que todo va en cámara rápida, me es inevitable no cerrar los ojos cuando pienso en él, quizás es una forma de hacer mas intimo el momento, que nadie sepa, es una forma de vivir y revivir mis momentos con él, sus ojos, sus manos, su pelo loco, sus sonidos, él.
Hoy recordé su habitación y junto con eso, lo bueno que era dormirse a su lado, es gracioso pensar en lo incómodo que era, en el espacio pequeño que lograba utilizar, en la lucha constante por las sábanas, en los cientos de golpes que le dí mientras dormía y en los retos que se llevó porque en mis sueños hacía cosas feas, no había nada más acogedor que una risa suya después de cada una de estas experiencias, me hacía sentir bien, escucharlo a mi lado; aunque dormir bien era un reto, no siempre lo logramos, la mayoría de las veces dormíamos muy mal y descansábamos poco, pero a pesar de ello, meterse a una cama helada y que alguien me abrazara era lo mejor, disfruté tanto despertar y mirarte mientras dormías, darte un beso y ver en tu carita una sonrisa, abrazarte en la noche y que me apretaras, que de la nada me dijeras "Te Amo" que nos tuviéramos ahí el uno para el otro.
Cuántas conversaciones, cuantas peleas, cuantas alegrías y por sobre todo cuantas experiencias vividas ahí, el placer de mirarte y lograr verte, poder tocarte y hacer un mundo inmenso en esas cuatro paredes, cuánto te extraño mi amor, cuánto valoro esos días y cuánto te valoro a ti, estoy enamorada y me hace feliz, te amo mucho, con todo mi corazón y más, creo que nunca había experimentado esta sensación tan rica y vertiginosa de amor, me haces feliz, me vuelves loca y me llevas a tierra cuando es necesario, te amo mi P, te amo tanto que podría dejar de escribir y rellenar solo con esas dos palabras.
Mi vida, estás lejos y falta un poco para vernos, sin duda es la espera más dulce y ansiosa que he tenido, cuento los días para verte, para volver a nuestro ritual de amor, para estar contigo y para poder decirte todo esto a ti.
Te amo como nunca lo he hecho.
CyP siempre.
Ha pasado rápido el tiempo, quizás no, pero con él pareciera que todo va en cámara rápida, me es inevitable no cerrar los ojos cuando pienso en él, quizás es una forma de hacer mas intimo el momento, que nadie sepa, es una forma de vivir y revivir mis momentos con él, sus ojos, sus manos, su pelo loco, sus sonidos, él.
Hoy recordé su habitación y junto con eso, lo bueno que era dormirse a su lado, es gracioso pensar en lo incómodo que era, en el espacio pequeño que lograba utilizar, en la lucha constante por las sábanas, en los cientos de golpes que le dí mientras dormía y en los retos que se llevó porque en mis sueños hacía cosas feas, no había nada más acogedor que una risa suya después de cada una de estas experiencias, me hacía sentir bien, escucharlo a mi lado; aunque dormir bien era un reto, no siempre lo logramos, la mayoría de las veces dormíamos muy mal y descansábamos poco, pero a pesar de ello, meterse a una cama helada y que alguien me abrazara era lo mejor, disfruté tanto despertar y mirarte mientras dormías, darte un beso y ver en tu carita una sonrisa, abrazarte en la noche y que me apretaras, que de la nada me dijeras "Te Amo" que nos tuviéramos ahí el uno para el otro.
Cuántas conversaciones, cuantas peleas, cuantas alegrías y por sobre todo cuantas experiencias vividas ahí, el placer de mirarte y lograr verte, poder tocarte y hacer un mundo inmenso en esas cuatro paredes, cuánto te extraño mi amor, cuánto valoro esos días y cuánto te valoro a ti, estoy enamorada y me hace feliz, te amo mucho, con todo mi corazón y más, creo que nunca había experimentado esta sensación tan rica y vertiginosa de amor, me haces feliz, me vuelves loca y me llevas a tierra cuando es necesario, te amo mi P, te amo tanto que podría dejar de escribir y rellenar solo con esas dos palabras.
Mi vida, estás lejos y falta un poco para vernos, sin duda es la espera más dulce y ansiosa que he tenido, cuento los días para verte, para volver a nuestro ritual de amor, para estar contigo y para poder decirte todo esto a ti.
Te amo como nunca lo he hecho.
CyP siempre.
viernes, 31 de mayo de 2013
martes, 12 de junio de 2012
El hombre del cigarro
De pronto el presente comienza a verse borroso, parece que le doy la espalda o quizás ya está detrás mío, la verdad es que ya no está y con él te fuiste también, como aire tibio o más bien hirviendo, pasaste a mi lado sin si quiera mirar. Parada en medio de todo y sintiéndome como si estuviera en nada, miré el suelo y respiré, recordé contar hasta tres y obviamente en el "intertanto" alguna que otra lluvia en mi cara sentí, tragué un sabor amargo de desilusión y te miré. Ahí estabas como si nada o como si todo, la verdad es que no vi la diferencia, no existe un antes de mi o un después de mi, sigues igual. Parado, con un cigarro en la mano y sin importancia, es como si la indiferencia te vistiera y tu apellido fuera "Nomeimporta".
Cómo si la gente fuera tonta!, pasas por su lado haciéndote el desentendido y pasas por mi lado haciéndote el lindo, además de desentendido obviamente. Se que es iniciativa tuya no hablar, se que eres tan proactivo que trabajas arduamente en nunca entender todo (o nada), eres la persona más aplicada que conozco.
Sí, tengo rabia o pena, o quizás, ambas dos, mas la segunda que la primera. Tanto tiempo entregado y tan infructuoso su goce, me rindo, no entiendo. Bastaba con una palabra...una palabra que ya no me importa, demás está seguir con esto, me despido y nos vemos, tu por ahí con tu cigarro y yo por allá con mi arte, que me dice mucho más que un hombre de pie con un cigarro y la tontera por delante.
Cómo si la gente fuera tonta!, pasas por su lado haciéndote el desentendido y pasas por mi lado haciéndote el lindo, además de desentendido obviamente. Se que es iniciativa tuya no hablar, se que eres tan proactivo que trabajas arduamente en nunca entender todo (o nada), eres la persona más aplicada que conozco.
Sí, tengo rabia o pena, o quizás, ambas dos, mas la segunda que la primera. Tanto tiempo entregado y tan infructuoso su goce, me rindo, no entiendo. Bastaba con una palabra...una palabra que ya no me importa, demás está seguir con esto, me despido y nos vemos, tu por ahí con tu cigarro y yo por allá con mi arte, que me dice mucho más que un hombre de pie con un cigarro y la tontera por delante.
Cristina Céspedes Zavala.
jueves, 31 de mayo de 2012
vayven
Sólo tengo razones para quererte, sólo te doy razones para que me quieras. A fin de cuentas estamos a par, yo de ida y tu de vuelta.
Cristina Céspedes Zavala
viernes, 25 de mayo de 2012
¿De que color son los besos?
¿De qué color son los besos? Los
besos? Los besos pueden tener varias formas y colores, en realidad, cambian de
color según lo que nos quieren decir. Algunos besos son pequeños, ruidosos,
divertidos y muy, muy bromistas, Son de un rojo brillante como…como las cerezas,
y nos dicen: “Te quiero por tu alegría, frescor y vitalidad”.
También hay momentos en que los
besos son jugosos y están llenos de vitaminas de color naranja, son los que nos
aprietan fuerte y dicen: “buenos días, es hora de levantarse”.
¿Y de color amarillo? ¿Existen
besos de color amarillo? Pues claro, los días en que los besos son cálidos e
intensos su color amarillo brilla como el sol, es cuando les dicen cuanto les
gusta su cariño y compañía, ah! Sí, y nos regalan abrazos y caricias, esos me
gustan mucho.
¿Y los que hacen cosquillas en
las orejas, en las mejillas y en el cuello? ¿Esos de qué color son? Pues
esos…esos… son los que se mueven al ritmo de la música y son de color verde
luminoso, como los campos y los bosques cuando sopla el viento, a los besitos
verdes les encanta la vida y les gusta ver respirar y crecer a los seres
queridos.
A veces en cambio, los besos son
largos y tranquilos, de un azul suave y esponjoso como el cielo, son los que
nos explican que su amor es profundo, sin límites, un amor tan grande que mires
donde mires parece que nunca se acaba. ¿Y pueden llegar hasta la luna? Seguro
que sí; y sabes?, muchas veces, los besos son de un color lila oscuro y
misterioso, son los besos que nos consuelan cuando estamos tristes o
confundidos, o no sabemos qué hacer, o a donde ir, y nos dicen: “no te
preocupes, que yo estaré siempre a tu lado”.
¡Los besos son de los colores del
arco iris!, lo miró, sonrió y lo besó en la frente, con un hilo de voz, volvió
a preguntar ¿y este? ¿De qué color era este beso?, le susurró al oído: “este, era un beso de buenas noches, blanco como la nieve, te quería expresar ¡Como me gusta el silencio!, la paz y la tranquilidad que siento a tu lado. ¿y sabes cómo nació el color blanco? De un beso que se dieron todos los colores del arco iris…
martes, 22 de mayo de 2012
Verde que te quiero verde!
En resumen y sacando cuentas, lo mejor del día, fue ver tu sonrisa infinita.
Me gusta tu sonrisa, pero no más que tu; me gusta tu abrazo y tu sinceridad, tu niñez y hombría, Me gusta mirar a través de tus ojos el mundo y ver que nuestras perspectivas no son tan distintas; me gusta ser tu antonimo no antagónico y complementario, me gusta, también, en viceversa; Me gusta mirarte y perderme, me gusta perderme al mirarte, me gusta perderme, solo y exclusivamente si es en ti.
Cristina Céspedes Zavala.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)